Parque ecológico construido con material de reciclaje revive al Cauca
Allí estaban unos 500 ranchos del sector de Villamoscas, asentado en el jarillón, un muro construdio hace tres décadas para evitar inundaciones.
Ese parque, promovido por la Corporación Autónoma Regional del Valle del Cauca (CVC), se desarrolló bajo la propuesta de la arquitectura ecológica, es decir, escombros en vez de ladrillos, promoviendo la transformación de los problemas de la ciudad, en soluciones para generar cultura ambiental, en la comunidad de Vallegrande, en el jarillón del río Cauca, al oriente de la ciudad.
En esta primera fase se invirtieron 1.365 millones de pesos. Este sector estaba impactado por la presencia de vivienda de invasión y la disposición de basuras y escombros, afectando negativamente la franja de protección del Cauca, ponía en riesgo la estabilidad del jarillón.
Es por eso que con el apoyo de la Fundación Río Cauca se convirtió este espacio es un lugar de vida. Se beneficia así la investigación sobre los usos potenciales de los materiales de desecho que existían en los 43 mil metros cuadrados del parque.
El resultado de siete meses de trabajo ha dado como resultado cinco jardines con su propia simbología: vida, inundación, desierto, recuperación y vida, y un malecón de 70 metros, para que la comunidad pueda contemplar la belleza paisajística.
Este parque ha usado material vegetal procedente de las podas en la producción de abono, más de 15 mil botellas y miles de residuos que dan ejemplo de cómo elementos denominados de desecho pueden convertirse en espacio de vida, para el orgullo de los caleños y los vallecaucanos.
Reliclando y construyendo ambiente
En este proyecto se han utilizado elementos como rocas y ladrillos de todos los tamaño, retales de concreto, baldosas, enchapes, hierro, tierra, gravilla, madera y vidrio. Además se utilizó la mano de obra de los habitantes del sector, beneficiados de forma directa por el proyecto.
